"Nuestro éxito radica en fusionar la producción y la distribución", señala el director general, Jorge Jayo

Mucho más que una mano de pintura ha tenido que dar el Grupo Tkrom al proyecto que nació hace 30 años para situarlo en lo alto de la tabla nacional. Una estrategia de concentración de fuerzas, y una apuesta por la innovación orientada a la salud y el medio ambiente, han dado color a la brocha del crecimiento, que pinta en línea ascendente. Para llegar a los primeros puestos del sector de las pinturas y la decoración, dominado por unos cuantos gigantes multinacionales, la compañía tuvo que romper moldes hace tres décadas. Acaban de recibir el premio a la Excelencia Empresarial por su Innovación de la Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales de Cartagena, COEC.

EL GERMEN DE UNA IDEA CON FUTURO

Todo se gestó en una reunión de pequeños distribuidores de pintura, que unieron sus fuerzas para ahorrar costes en la compra de materias primas al margen de las imposiciones de los grandes fabricantes. "Si todos tenían en común la necesidad de adquirir pinturas, por qué no fabricarlas y establecer sus propias pautas", evoca el germen de la empresa su director general, Jorge Jayo.

Aquella primera fábrica, que supuso hacer realidad una idea común, comenzó a funcionar en Castellón, aunque el rápido crecimiento de la actividad obligó a buscar espacios más amplios. La unión de las dos entidades, Eupinca y Anadeco Gestión -integradas por los mismos fundadores-, encontró en Cartagena un espacio idóneo para una fábrica mayor en las condiciones ventajosas que la ciudad portuaria ofrecía en los años noventa para atraer nuevas empresas tras la depresión industrial.

"Nuestro éxito radica en haber unido la fabricación y la distribución, ya que eliminamos los pasos intermedios y conocemos bien las necesidades de los clientes", explica el director, quien señala "el inconformismo como la seña de identidad que nos ha permitido crecer con un plan de innovación".

LA TONALIDAD DE LA DIFERENCIA

No se conformaron con obtener una línea de pinturas al agua con mejores condiciones en sus modernas instalaciones de Cabezo Beaza. En 2016 lanzaron 'Infinity Colors', un sistema tintométrico industrial exclusivo, orientado a reducir los tiempos de entrega a un tiempo de entre 24 y 48 horas. Ya con esta línea de producción, la empresa apuntaba a "mejorar los niveles de agresión ambiental mediante el uso de pastas con menos toxinas", apunta Jayo. El CEO señala la apuesta que el Grupo ya realizó con este nuevo sistema: "Encarecía ligeramente el producto, pero obteníamos un beneficio ambiental evidente", afirma.

En esa línea han enfocado sus esfuerzos en innovación de los últimos años. "Los que no estén en esa dirección desaparecerán, pero luchamos con el condicionante de tener que competir con otros que no soportan el sobrecoste de la innovación como nosotros", explica Jorge Jayo.

A contracorriente se encuentran además la batalla de los precios en el mercado de las pinturas, que sigue primando en la decisión de compra de una parte de los consumidores. "La innovación no tiene un rápido retorno en España", asegura el director de Tkrom, que sin embargo ha definido su línea de trabajo "en línea con los valores de la sociedad, de protección a la salud y al medio ambiente".

PINTURAS QUE MEJORAN EL AIRE

"Hemos incorporado personal cualificado, como doctores en Química, y procuramos potenciar la I+D+i con acuerdos con las universidades y otras empresas", expone Jorge Jayo. "Uno de nuestros proyectos más recientes es el que hemos abierto con Graphenstone -especialista en recubrimientos ecológicos- para comercializar pinturas excepcionales, que absorben CO2 y mejora la calidad del aire", adelanta el director.

Otra línea de investigación abierta es la que llevan a cabo con Optimiza -empresa de tecnología de recubrimientos- para fabricar un sistema de protección anticorrosivo con mejoras ambientales.

El director de Tkrom advierte del salto funcional que está experimentando la pintura. "En el futuro hará mucho más que dar color. Ya hay pinturas con propiedades antiestáticas, antiácaros o antibacterianas, de aislamiento de la red wifi o como complemento con los nuevos sustratos de nanotecnología en las paredes", explica. El responsable de una de las marcas punteras en pintura a nivel nacional sabe que "ya la gente no pinta con cualquier cosa", una tendencia que se reforzará en los próximos años debido a la preocupación por la salud y el medio ambiente, potenciada por la proliferación de las alergias y otros condicionantes relacionados con el clima y el bienestar.

En los proyectos de investigación, "la colaboración con el INFO nos ha permitido llevar a cabo una gran evolución", señala Jayo.

ROBOTIZACIÓN Y REUTILIZACIÓN

El futuro ya ha llegado a la sede cartagenera de Tkrom. "Una empresa como la nuestra tiene que adelantarse para seguir compitiendo en la primera división", recuerda el responsable. Ya han incorporado un robot en dos líneas de envasado, que les permite ahorrar tiempo en la cadena de producción, reducir costes y evitar errores. "Lo hace todo bien, coloca los envases siempre igual e incorpora un sistema de protección ambiental para que el envase llegue siempre limpio a la tienda, sin vertidos ni pérdidas", destaca el empresario.

La robotización forma parte del proceso de transformación al modelo de Industria 4.0 que, para Tkrom, pasa por "la digitalización para optimizar el control de todos los sistemas". "Los que no estén digitalizados, desaparecerán en 10 años", augura el director del Grupo. Su objetivo apunta a "la automatización total del sistema para el año 2023".

Con universidades y otras empresas estudian esa otra vuelta de tuerca hacia la modernización que utiliza la filosofía de la economía circular para reutilizar envases, etiquetas y otras materias primas derivadas de sustancias vegetales con el fin de ahorrar recursos y reducir residuos al máximo.

ÁFRICA Y EUROPA EN EL HORIZONTE

Al mismo tiempo, la firma cartagenera tiene que lidiar con un mercado interno que prevé una moderada ralentización. La facturación del sector de pinturas y barnices superó en 2018 la cifra de 1.600 millones de euros, lo que equivale a un aumento del 2,9% sobre el año anterior, según el estudio Sectores 'Pinturas y Barnices' del Observatorio Sectorial DBK de Informa, filial de CESCE (Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación).

El director de Tkrom coincide en la valoración del estudio, que augura para el bienio 2019-2020 un leve enfriamiento. "Crecerá por debajo del 2%. El mercado interno está justito y, por otro lado, no hay presupuestos y, por tanto, no hay obra pública", explica el experto, quien cree que en esta situación apuntalan el frenazo las exportaciones.

Sus productos se distribuyen ya por todo el territorio nacional y en Portugal, el norte de África, el sur y el centro de América, pero ya están "consolidando otros mercados para 2020 porque creemos que va a ser un año muy positivo", explica el director. Sus miras apuntan al mercado africano, donde "a pesar de la inestabilidad política, presenta unas perspectivas muy interesantes". Centrarán además esfuerzos en países europeos que hasta ahora tenían unas condiciones de entrada más estrictas, pero que Tkrom confían en abrir con la llave de la innovación y sus pinturas protectoras de la salud y el medio ambiente.

Web TKROM